Quizás, en estos dias, algunas de estas situaciones parezcan relativamente habituales ya que la música pop se ha comercializado hasta un extremo que sin histerias adolecentes, no hay estrellas pero, allá por los 60, muchas de estas escenas eran atípicas y seguramente, escandalizaban a una sociedad que no terminaba de comprender qué estaba ocurriendo cuando una generación empezó a gritar: acá estamos.
Claro que no todo el mundo pensaba lo mismo y para algunos, estas fiestas no eran nada agradables.
Por suerte, en esas épocas, le dejaban la pipa ...