Hay que situarse en tiempo y espacio. 1968. La grabación del Album Blanco había dejado un tendal de dificultades. Por un lado, los chicos crecen y se transforman en jóvenes adultos. Lo que antes era simpático puede transformarse en irritante, lo divertido aburre, las metas cambian. The Beatles, como grupo, había entrado en una etapa llena de tensiones lógicas e ilógicas. Ego, paranoia, fama, fortuna, un coctel explosivo que terminaría mal.
Paul creía que sólo había una solución para regresar al camino del que se habían apartado, como si tal cosa hubiera sido posible. El plan era hacer un show frente a una pequeña audiencia y grabarlo para que saliera en un programa especial de televisión de una hora.
Sería: el regreso.
momma-youve-been-on-my-mindSe barajaron ideas pero ninguna lograba unanimidad, y es que ninguno de los otros tres se sentía entusiasmado; cada uno de ellos estaba explorando nuevos caminos personales y necesitaban espacio suficiente para llevarlos adelante. Los Beatles eran una carga demasiado pesada para los Beatles y no lograban sacársela de encima ni aceptarla. Los cuatro trataban de ser lo que no podían ser. No podía volverse atrás como Paul quería ni seguir adelante ignorando el pasado como deseaban los demás.
Aunque no se ponían de acuerdo, un productor les sugirió que por lo menos lo intentaran y comenzaran a ensayar. Luego, verían a donde llegaban.
Las sesiones comenzaron el jueves 2 de enero de 1969 en los Twickenham Film Studios de Londres y con el tiempo se convertirían en una serie de ábums piratas conteniendo horas y horas y horas de grabaciones a las que algunos llamaron The Get Back Sessions.
Los discos comenzaron a circular muchos años después y, aunque nadie sabe exactamente cuántos hay, los más difundidos son los ocho CDs de Yellow Dog. Claro, sólo son aptos para fanáticos compulsivos ya que ninguna persona en su sano juicio podría escucharlos completos sin caer en un letargo del que difícilmente podría recuperarse.
blues-jamEl grupo se junta en esos viejos y fríos estudios a ver qué pasa mientras dos cámaras los filman implacablemente; una se mueve sobre rieles entre ellos y la otra permanece estática enfocando desde el cieloraso. Como cada una de ellas sólo admitía 16 minutos de grabación, la película está cortada en muchas partes y en el audio se escuchan claramente los beeps de sincronización. Dicen que el director, Michael Lindsay-Hogg, filmó 223 rollos de película de las que poco se ha visto.
En los discos se los puede escuchar trabajar en diferentes canciones, hacer arreglos, hablar y hablar y hablar. Si bien el sonido es bastante bueno, se los escucha aburridos, con ganas de no estar ahí, preguntándose ¿qué hacemos? Los estudios Twickenham no eran un lugar adecuado, tenían mala acústica y encima, debían amoldarse a los tiempos de las cámaras. Era la empresa más confusa y frustrante de su carrera.
Las sesiones comenzaban oficialmente a eso de las 11 de la mañana pero difícilmente lograban reunirse antes de la una. El clima era tenso, nada era terminado, todo era bastante oscuro, sin magia. Bajo la superficie se escondía mucho resentimiento y de tanto en tanto, salía a la luz. Eran un grupo en vías de disolución, cansados los unos de los otros.
Algo del material, lo más digerible, está incluido en la película Let it be pero la mayor parte permanece inédito aunque pueden verse fragmentos aquí y allá. A decir verdad, no hay mucho que ver, sólo cientos de canciones inconclusas.
A medida que pasaban los días, la hostilidad iba en aumento. Yoko Ono opina y da sugerencias, Paul ordena y les dice cómo tocar. Los roles se permutan. El grupo ya no es un grupo. Habían pasado once semanas grabando el Album Blanco y esto era demasiado para cualquiera; debían crear y ensayar por lo menos 30 nuevas canciones y lo cierto es que no la tenían.
mailman-bring-me-no-more-bluesAlrededor del 10 de enero, comenzaron a discutir sobre el famoso show de TV. Paul insistía y John, como vocero de los otros, se negaba rotundamente. La discusión se convirtió en pelea. Ese día, George se despidió: See you round the clubs, subió a su auto y se fue a su casa de Esher. Luego, desapareció aunque decían que estaba visitando a su padres en el norte de Inglaterra. No tenía intenciones de regresar.
Luego del almuerzo, John, Paul y Ringo volvieron al estudio y continuaron solos. Yoko se sentó en el lugar que ocupaba George y comenzó a improvisar y a gritar. Paul tocaba Martha my love y se unía al experimento vanguardista. Todo se encamina a una jam session con feedback de los instrumentos y luego de más de 10 minutos de catarsis, sin pronunciar una palabra, se levantan y se van.
subterranean-homesick-bluesEl lunes 13 vuelven a reunirse. Esperaban que durante el fin de semana George se hubiera calmado y volviera a las sesiones aunque todos sabían que esto no iba a ocurrir. Lennon bromeó y propuso que lo reemplazaran por Jimi Hendrix o Eric Clapton. Las horas pasaban, los días pasaban y lo único que hacían era fumar, hablar y de tanto en tonto tocar brevemente.
George volvió a Londres el miércoles 15 y se reunió con el grupo varias horas. Había decidido abandonar a The Beatles. Tardaron cinco horas en convencerlo de que que no lo hiciera. Las condiciones que exigió eran pocas. Basta de Twickenham, nada de shows en TV, como mucho, podrían usar algunas de las ideas preliminares para hacer un nuevo álbum. Volverían a los estudios de Apple y llamarían a Billy Preston para que se uniera a las sesiones y tocara el piano.
Lo de las presentaciones en vivo quedaba pendiente pero las posibilidades que se les ocurrían eran absurdas, tocar en un hospital rodeados de niños enfermos, en un barco en las islas griegas, en las pirámides de Egipto con un público formado por beduinos, en Gibraltar. Finalmente, el 30 de enero de 1969, subieron a la terraza del edificio de los estudios de Apple, enchufaron sus instrumentos y dieron su último concierto frente a un pequeño grupo de amigo y empleados. En pocos minutos revolucionaron el vecindario y la policía lo suspendió porque los comerciante se quejaban por el alboroto.
Aún lo veo y sigo pensando lo mismo. Es la última vez que se se divirtieron. Aunque meses después grababan otro álbum más (Abbey Road), siempre creí que The Beatles habían dejado de existir como grupo, en el mismo momento en que el bobby ordenó apagar todo y los llamó a silencio.